PREGUNTAS FRECUENTES
¿Cuántos comidas debe hacer al día?
Conviene que el niño a partir de su primer año ingiera tres comidas mayores (desayuno, comida y cena) y dos colaciones (a media mañana y a media tarde) debido a que su capacidad gástrica es reducida y su actividad física es constante, de modo que las comidas pequeñas y frecuentes se adaptan mejor a sus necesidades. Es necesario que en cada menú se incluyan los 3 grupos de alimentos que ya mencionamos en forma variada y atractiva. Evita que tu niño consuma golosinas entre comidas pues si lo hace es común que no le de hambre y tengas dificultades a la hora de sentarlo a la mesa.
¿Debo preocuparme si mi hijo no quiere comer?
La etapa escolar de lo niños (de los 6 a los 10 años) se denomina periodo de crecimiento latente; es decir que en ella los incrementos entre el peso y la estatura se mantienen constantes así que el crecimiento es muy lento y por lo tanto es normal que la cursen acompañada de un periodo de inapetencia (no sienten hambre) así que no te preocupes si ocasionalmente tu niño no quiere comer. Recuerda que ellos están desarrollando su autonomía y no debes forzarlo; sin embargo es importante que se siente en la mesa durante los horarios de comida aunque no coma para fomentarle el hábito y pueda socializar. En caso de que notes que tu pequeño baja de peso, se ve cansado, irritable, presenta pigmentaciones en el rostro o ha dejado de crecer consulta a tu médico.
¿ Que hago si mi hijo rechaza nuevos alimentos?
Todos los niños tienden a rechazar los alimentos o platillos nuevos pero esto se puede modificar. Para ello, es importante saber que todos los niños cursan con neofobia (temor a lo nuevo) debido a que ingerir algo que no conocen les implica un riesgo. Lo que debes hacer, es presentarle ese alimento acompañado de otros que ya conozca de preferencia en una porción menor y separados unos de otros, si tu hijo lo rechaza no lo regañes ni lo forces simplemente vuelve a presentárselo después para que se familiarice con él y con esa exposición repetida se anime a probarlo. Se ha estimado que en general requiere un mínimo de 10 exposiciones a los alimentos nuevos para que el niño los acepte ¡ánimo, no desistas!
¿Porqué mi niño sólo quiere comer cosas dulces?
La predilección por los alimentos dulces y salados es universal, así como el rechazo a los sabores amargos y ácidos. Aumentar la familiaridad con los alimentos y presentarlos en situaciones positivas, son estrategias que permiten cambios en sus preferencias. Combina colores y texturas para hacer más atractivo el alimento y deja que el niño experimente con todos sus sentidos (vista, olor, sabor, tacto, incluso oír y saborear) bajo estas circunstancias es más probable que acepte los alimentos.
